Barry Keoghan reconoce ser un adicto a pesar de la muerte de su madre por sobredosis: "La curiosidad es muy poderosa"

La infancia de Barry Keoghan fue muy dura tras crecer en un entorno familiar marcado por las drogas y la muerte de su madre por sobredosis de heroína cuando él tenía 12 años.

Después de que el actor perdiese a su madre, pasó gran parte de su infancia en lugares de acogida hasta que finalmente pudo estudiar interpretación y despuntar entre los jóvenes talentos irlandeses de su generación.

A sus 32 años, el intérprete ha estado en películas como Saltburn, Bird, Los amos del aire, Almas en pena de Inisherin, Eternals, El caballero verde, Chernobyl, Dunkerque o El sacrificio de un ciervo sagrado, además de ser el nuevo Joker y dar vida a Ringo Starr en las películas sobre The Beatles.

Sin embargo, el camino hacia este éxito no fue fácil ya que él mismo sufrió en sus carnes la adicción a las drogas que tanto daño hicieron a su familia.

En una entrevista con Hollywood Authentic, Keoghan se ha abierto sobre los problemas que tuvo: "Ya no lo niego. Entiendo que tengo una adicción, y soy una persona adicta. Cuando lo aceptas, por fin puedes seguir adelante y aprender a lidiar con ello".

"Mi padre falleció por algo similary yo perdí a mi madre por ello. Perdí a dos tíos y a un primo por las drogas. Eso debería bastar para decir: 'Vale, si me meto con esto, estoy jodido'. Pero la curiosidad es muy poderosa. A veces es beneficiosa y a veces perjudicial. En mi caso, fue perjudicial. Ni siquiera la llegada de mi propio hijo a este mundo me impidió ser curioso. Ya sabes, vas a Los Ángeles, a Hollywood. Hay una enorme presión y un estilo de vida diferente que te beneficia y te perjudica", ha confesado

"Tengo cicatrices que lo demuestran. Son resultado del consumo", señaló, mostrando al entrevistador, según el medio, las marcas en sus brazos de las lesiones que sufrió. "Ahora estoy en paz y soy responsable de todo lo que hago. Lo acepto. Estoy presente. Estoy contento. Soy padre. Estoy empezando a ver esa neblina que antes había; ahora es un poco más nítida y colorida", aseguró, disculpándose consigo mismo "por todo el dolor que he causado a la gente".

Junto a este testimonio, el actor ha recordado como de niño oía a su madre gritar en casa preguntando por sus hijos mientras luchaba contra la adicción y buscaba dinero para comprar: "Y solo nos decían que nos quedáramos en la cama. No podíamos bajar a abrazarla".

El actor ha sido en más de una ocasión criticado por su turbulenta vida personal, recibiendo acusaciones de ser un padre ausente de su hijo de tres años.

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