La Guardia Civil afirma que "al menos 15 personas" participaron en la violación de la menor de Valencia

La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Valencia ha celebrado esta semana el juicio contra cuatro hombres acusados de delitos sexuales cometidos contra una menor de 14 años durante una fiesta en un municipio de la comarca valenciana de la Vall dÁlbaida, en septiembre de 2020.

El guardia civil responsable de la investigación declaró el pasado martes ante el tribunal que, según la información recabada, "al menos 15 personas" participaron en los abusos sexuales a la menor aquella noche. La víctima acudió a una fiesta en el campo, donde coincidió con algunos de los acusados. Según el relato recogido por la Fiscalía, la menor bebió tres copas y, tras la tercera, comenzó a sentirse mareada. Dos de los procesados la llevaron entonces a una zona apartada y la agredieron sexualmente.

Sobre las 05:00 horas, la víctima pidió a otro de los acusados que la llevara a casa de su abuela. Según el escrito del fiscal, el hombre le puso como condición que le hiciera una felación, a lo que la menor se negó. Poco después, ya en su domicilio y aún aturdida, la joven recibió un mensaje de uno de los implicados en los primeros abusos, quien le propuso mantener relaciones sexuales. La menor accedió, aunque el agente encargado del caso declaró que, en su opinión, ninguna de las prácticas sexuales fue consentida.

Cinco abusos diferentes

Los agentes de la Guardia Civil identificaron hasta cinco situaciones de abuso distintas esa noche. El más grave ocurrió detrás de un muro, en un lugar apartado del municipio. Aunque no se ha podido identificar a todos los implicados, los testimonios recogidos indican que al menos una quincena de personas participaron en los hechos, intercambiándose a la menor y sometiéndola a distintas prácticas sexuales.

El sargento que tomó declaración a la víctima explicó ante el tribunal que a la joven "se le veía muy cría, muy inocente y con cara de niña, y con muy poca autoestima". Según este testigo, "cuando la escuchabas hablar se notaba que no tenía un grado de madurez suficiente". Al menos dos de los acusados conocían previamente a la menor y sabían que era menor de edad.

Relaciones sexuales delictivas

Sobre el estado de la menor esa noche, los testigos coinciden en que había bebido mucho. "Va tambaleándose y hay que cogerla para que no se caiga", relataron. Los investigadores subrayan que, por la edad de la víctima y su estado de embriaguez, todas las relaciones sexuales mantenidas esa noche son consideradas delictivas.

El instructor de la investigación también señaló que la menor no mostró ánimo de perjudicar a los acusados y que, aunque era consciente de que lo que había ocurrido no estaba bien, intentó minimizar los hechos en su declaración inicial. "Quería denunciar sin que se supiera la magnitud de lo que allí había sucedido", explicó el agente. La menor explicó en su declaración que los agresores "se acercaban por detrás y me penetraban, yo no tenía ni fuerzas para gritar".

Sin embargo, los agentes insisten en que, dadas las circunstancias, no puede hablarse de consentimiento real. Uno de los acusados ya fue condenado en un juzgado de Menores de Valencia tras reconocer los hechos y aceptó una medida de dos años de libertad vigilada.

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