Sigue abierta la vía diplomática para rebajar la tensión entre Rusia y Ucrania y Macron hablará de nuevo con Putin

La tensión en la frontera entre Rusia y Ucrania continúa. Rusia mantiene allí más de 100.000 militares desplegados. Estados Unidos ha enviado 3.000 soldados a países del Este de Europa (Rusia, Polonia, Alemania) para reforzar las defensas de sus aliados ante un posible ataque ruso contra Ucrania.

"La situación actual exige que reforcemos la postura disuasiva y defensiva en el flanco este de la OTAN", afirmó el portavoz del Pentágono, John Kirby, en una rueda de prensa.

Continúan los esfuerzos diplomáticos para intentar rebajar la tensión en la crisis de Ucrania. El canciller alemán, Olaf Scholz, viajará a Moscú y el presidente francés, Macron hablará hoy de nuevo con Vladímir Putin. El presidente ruso también irá hoy a un país aliado a China.

Terminadas las maniobras en el Báltico, el Ejército ruso no vuelve a casa: ahora se despliega en Bielorrusia. Ejercicios conjuntos frente a la frontera ucraniana que se decidieron en diciembre, se defiende el Kremlin, y que no significan que quieran ir a la guerra.

"Ninguno de nosotros, ni Washington, ni Kiev, ni ninguna otra capital, se puede permitir el lujo de excluir una invasión de la lista de amenazas", asegura Dymitro Kuleba, ministro de Exteriores ucraniano.

Un miedo con el que conviven desde hace ocho años en esta zona que se disputan rebeldes prorrusos y fuerzas ucranianas. Los combates les mantienen escondidos bajo tierra. "Queremos volver a nuestras casas a una vida normal, ¿cuándo terminará esto?", preguntan.

Aunque la propuesta secreta que Estados Unidos y la OTAN hizo Rusia, y que publica 'El País', exige una desescalada para iniciar el diálogo, el cruce de acusaciones continua.

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